¿Alguna vez os habéis
preguntado qué es el folclore? ¿Es lo mismo que clásico o popular? Pues esta
fue la pregunta que me hice yo al empezar este nuevo bloque. La respuesta a la primera cuestión es la siguiente: el folclore
significa tradición cultural y que engloba diversos ámbitos, arte, música,
gastronomía, etc. Más o menos si que fui capaz de llegar a una definición
acertada sobre lo que es el folclore y los textos folclóricos.
Una vez reflexionas la
definición es muy posible que se tienda a pensar, y haciendo referencia a la
segunda pregunta, que entonces el folclore es lo mismo que clásico o popular,
pero esto no es así. Para justificarlo veamos la definición de estas palabras:
- Popular: Algo muy conocido y propio del pueblo.
- Clásico: Algo que está muy asentado en el entorno.
- Folclórico: normalmente estas tradiciones son populares en el sentido de ser propias
del pueblo, pero no tienen porque ser popular en el sentido de ser muy
conocidas.
Creo que es importante
tener conciencia de que no son lo mismo, pues por lo menos en un principio yo
pensaba que se trataba de lo mismo cuando se hablaba de un ciento clásico,
popular o folclórico, que se conocía de diferentes formas. Y es que es
importante enseñarles a los niños desde un principio que es cada cosa y como se
las conoce.
- No tienen autor, es de, se transmiten de boca en boca. Cada persona que locuenta modifica la historia, ya sea de manera intencionada o no.
- Al no tener autor existen varias versiones de la misma historia, por lo que
no se puede establecer una como original.
- Es imposible saber el origen de dichas historias.
Hay que aclarar en
relación a este último punto, que a pesar de que en la actualidad los textos
folclóricos se transmiten en forma de cuentos para niños, en su origen estas historias no eran para niños, pues se contaban
cuando se escondía el sol a la luz de la lumbre, con la única intención de
entretener, y que esas historias no eran del todo invenciones, sino que se los
reflejaban los sucesos, los miedos, los deseos y las esperanzas del
pueblo. Esto se puede comprobar por ejemplo en el cuento de Caperucita, es
posible que se creara, por una historia real en la que una niña fue atacada por
un lobo, o simplemente por el propio miedo que se le tenía a que algo así
ocurriera.
Haciendo referencia a
este último cuento, por poner un ejemplo ¿Cómo es posible que algunas personas
conozcan diferentes versiones del mismo cuento? Pues bien, independientemente
de que la persona que lo cuenta lo haya podido modificar voluntariamente, en muchos casos esto se debe a
que al transmitirse de forma oral, los cuentos se adaptaban según la zona donde
se contaban.
Algo que genera debate,
es si los cuentos folclóricos son machistas o no. Pues hay que decir que esto
es totalmente falso. Hay que tener en cuenta que estos cuentos surgieron y han
pasado de generación en generación, por sociedades machistas y es por ello que
puede que queden restos, sobre todo en los cuentos más realistas, donde la
mujer tiene un papel más familiar, ligado al hogar y el hombre al trabajo fuera
de la casa. Pero sin embargo en estos cuentos las mujeres son las protagonistas
y pueden elegir con quien casarse,
consiguen que el hombre que les gusta se sienta atraído por ellas. Todo esto es
debido a como hemos visto antes, que los cuentos folclóricos recogen los deseos
de los habitantes de aquellas épocas, pues estos cuentos la mayoría de las
veces eran contados por mujeres.un ejemplo que refleja que los cuentos
folclóricos no son machistas, es el Cuento de los tres deseos, que refleja
perfectamente como la mujer manda sobre
el hombre.
Al igual que otros
textos los textos folclóricos tienen manifestaciones en los distintos géneros.
El teatro, el cual
giraba en torno a dos temáticas, el de carácter religioso y el de carácter
profano. Aunque también había otro tipo de representaciones de carácter infantil, conocido como “títeres de
cachiporra”, iban por los pueblos en un carro con una ventana que servía de
escenario. Con pocos personajes y donde siempre ocurría lo mismo. En este tipo
de teatro era importante la interacción entre el público y los personajes.
¿Seguramente esto os
suene de algo? A mí por lo menos si, he de decir que no sabía que se conocía
con este nombre, pero recuerdo que cuando era pequeño e iba al retiro estaba
lleno de este tipo de representaciones. Lo cierto es que los recuerdo con mucho
cariño y el día de mañana no dudaré en utilizar estas representaciones con los
niños, para trabajar tanto los textos folclóricos como valores que considero
importantes y que de está manera que además se lo pasarán bastante bien.
También existen
manifestaciones en la poesía. De tal manera que durante mucho tiempo la poesía
de los textos folclóricos ha estado muy unida a la música. Este género es el
que más manifestaciones infantiles recogen, ya que recoge todas las canciones
que los niños cantaban.
Lo cierto es que cuando
vimos este bloque en clase y sobre todo mientras hago el artículo, me doy
cuenta que he estado en contacto con textos folclóricos más de lo que yo era
consciente. Desde pequeño he escuchado las canciones de El Nuevo Mester de
Juglaría, que recoge una gran cantidad de canciones folclóricas y de las que
guardo un magnifico recuerdo. Por ello es que en mi clase ya se como trataría
este apartado, ya que son canciones muy rítmicas y fáciles de recordar.
Por último el género de
la prosa, compuesta por un catálogo muy extenso. Vladimir Propp,
famoso personaje del siglo XX, clasificó los textos folclóricos en cuatro
categorías, que son:
- Mitos: donde incluyó muchas historias que hoy consideramos paraliteararias.
- Cuentos de animales: donde incluía dos tipos de textos, las fábulas (en las
que los animales representan vicios y virtudes humanas, conocidos como textos
alegóricos. Y los propios libros de animales, que son cuentos animistas,
en los que los seres humanos están representados por animales. Todos los
personajes deben ser animales.
- Cuentos de fórmula: son aquellos en los que la persona que los cuenta ha de
memorizar una o varias fórmulas que sustenten el cuento, que sin el cual este
no sería igual. Dentro de estos existen los cuentos acompañados de
música, los infinitos y los cuentos acumulativos, que tienen solo una acción y
a la cual se le van repitiendo personajes.
- Cuentos de hagas: en los que hay un personaje mágico que normalmente hace
de ayudante del protagonista
La estructura que siguen
los cuentos folclóricos es la siguiente:
- El protagonista que vive dentro de un núcleo
familiar que lo mantiene protegido. (Planteamiento)
- Cuando llega a la adolescencia por varios motivos se
ve obligado a abandonar el núcleo familiar y enfrentarse a los peligros de la
vida. (Nudo)
- Se crea un nuevo núcleo familiar, cuando se supera el peligro o
quizás le salve y vuelva al planteamiento. (Desenlace)
Seguramente después de
ver la estructura que siguen estos cuentos os hayáis dado cuenta que a lo largo de vuestra vida os habéis
leído u os han leído bastantes.
Es importante que
cuando se trabaje con cuentos folclóricos, si el profesor quiere llevar a cabo
alguna adaptación debe tener en cuenta algunas partes que se deben respetar,
que son: el viaje iniciático, pues casi todos los cuentos folclóricos
representan de alguna manera el paso de la niñez a una vida adulta. Esta niñez
se representa dentro de un núcleo familiar, que protege. Hay un momento, en el
que el protagonista debe abandonar el núcleo familiar. En este viaje, se
enfrenta a diferentes aventuras, hasta llegar a la vida adulta, cuando creará
un nuevo núcleo familiar. Por eso hay que ser conscientes de los puntos
principales de la historia hasta llegar a la vida adulta, respetando la esencia
del cuento original, sin modificarla totalmente.
Como todo, el folclore
tiene su historia y en el siglo XVII Charles Perrault, como miembro de la corte
de Luis XIV, y ante el insomnio que este padecía, debían contarle cuentos para
mantenerle entretenido. Por lo que Perrault, se dedicó a escuchar y adaptar los
cuentos para moralizar a la nobleza. Es por ello que no se le considera ni autor ni
recopilador, sino adaptador.
En el siglo XIX, Los
Hermanos Grimm, en un inició intentaron recopilar por escrito los cuentos
culturales propios de Alemania. Finalmente acabaron por recopilar historias de
otros países, que se contaban en Alemania. Publicados como “Cuentos de los
niños y delhogar”, teóricamente estaban
dirigidos para los niños, pero se vieron obligados a modificar ciertos
aspectos, por las quejas
En la segunda mitad del siglo XIX, Christian
Andersen en Dinamarca, escribió para niños, siguiendo dos vertientes, los creados por él y las adaptaciones, de
las que adaptaba conservando las partes que le gustaban y modificando el resto.
Si alguien se pregunta,
si en España no hemos tenido adaptadores, la respuesta es que si. Saturnino
Calleja y el Padre Coloma, ambos siguieron las dos vertientes de Andersen,
aunque Coloma adaptó con una finalidad moralizante desde el punto de vista
religioso.
Pienso que es importante
que los niños conozcan aunque sea de manera superficial de donde viene y
cual ha sido por así decirlo, la historia de los cuentos folclóricos y las
adaptaciones.
En cuanto a la actividad de contar cuentos a los niños, creo que si que es
algo que se realiza por parte de algunos profesores, pero mayoritariamente en
el primer ciclo, a partir de entonces muchos profesores piensan que contarles
cuentos a los niños, es para los más pequeños, que es perder el tiempo y que lo que deben hacer es
leerlos por si mismo para así practicar. Y creo que es un error total, pues a
todos nos gusta que nos cuenten cuentos, lógicamente si se cuentan bien y
poniéndole interés, pues si esto es así, porque cuando pasan del primer ciclo a
los niños no hay que volver a contarles un cuento en clase, es más se
debería hacerse pues benefician a los
niños en cuanto a que, los cuentos estimulan la fantasía, la sensibilidad, la
memoria y la expresión. Ayudan a desarrollar el lenguaje, ampliando
vocabulario, modelos expresivos nuevos y disipando dudas de construcción
gramatical, además de despertar el intelecto, aumentando la percepción y la
capacidad de comprender. Los niños aprenden a escuchar con atención y
a ser pacientes, elementos primordiales para el aprendizaje. Los cuentos
mejoran el conocimiento espacio-temporal (dónde y cuándo sucede, qué
ocurre antes y qué después…). Fomentan la empatía o capacidad de ponerse en
lugar del otro. Transmiten valores como la constancia, la amistad, la
modestia, la honestidad, la lealtad, etc. Enseñan a identificar emociones como
el miedo, el amor, la frustración, la ira, la envidia o el deseo. El niño se
identifica con personajes y situaciones de las historias, lo cual le ayuda a
afrontar retos y miedos con una visión más amplia. Asimismo, le facilita la
resolución de problemas.
No se debería trabar únicamente el cuento, sino que también es positivo
que acercarles el teatro o la poesía. Para ello, personalmente estaría a favor
llevar a cabo obras como el teatro de cachiporra dirigidas para los niños. Y para
trabajar la poesía, como he dicho antes, me ayudaría del grupo, El Nuevo Mester
de Juglaría.
Paginas de interés:
Como adaptar un cuento folclórico
Títeres de cachiporra
Consejos para contar cuentos
Hola Víctor, me gustan mucho las páginas que has puesto de referencia y creo que es un artículo que capta perfectamente las ideas clave que hay en este bloque.
ResponderEliminarPerfecto. ¡Ahora has pillado lo del machismo! ¡por fin!
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